“Entre el Sujeto y el Otro: Acting y Pasaje al acto”

“Entre el Sujeto y el Otro: Acting y Pasaje al acto” - Sylvia Moretti

Escuela Freudiana de Mar del Plata
Jornadas de Cartel
1 de Junio de 2019 – MdP
Cartel: “Entre el sujeto y el Otro: Acting out y Pasaje al acto”
Cartelizantes: Adriana Muiños, Malvina Schnack, Mónica Moure, Cintia Montes, Sylvia
Moretti.
Plus 1: María Clara Areta
“Alienación , Separación - Pasaje al acto, Acting out: modos de constitución subjetiva”
Agradezco a las integrantes del Cartel, a María Clara Areta (plus 1 del Cartel y Directora de la
EFmdp), a la coordinadora de esta mesa de trabajos: Gisela Avolio, a los miembros de la EFmdp
y al público presente.
El título de nuestro Cartel: “Entre el Sujeto y el Otro: Acting y Pasaje al acto”, es una referencia
al Seminario 10, La Angustia (Capítulo 9, página 129). Este trabajo es efecto de la relectura de
algunos fragmentos de dicho Seminario (bajo la orientación dada por María Clara Areta, en un
grupo de estudio) y del “impacto” que me causó la lectura del Seminario 15, “El acto
psicoanalítico”, en las clases que María Clara Areta dio en la EFmdp, en el 2017-18.
Busqué “impacto” en el diccionario. Algunos de sus sinónimos son: choque, encontronazo,
colisión, huella, marca, signo, emoción, impresión, sensación. Justo son nueve palabras. Parece
la “tabla de los afectos” que Lacan presenta en el primer capítulo del Seminario 10! Pero, en
este caso, se trata de los afectos/efectos que me produjo lo planteado por Lacan en el
Seminario 15 en relación a la conceptualización del acto psicoanalítico, a la negación del cogito
cartesiano y sus consecuencias, y a la aplicación (su aplicación) de la lógica articulada a
conceptos del Psicoanálisis.
Lacan construye la “tabla de los afectos” regida por dos ejes, que - a su vez- son efecto de la
operación de lectura de Lacan del texto freudiano “Inhibición, Síntoma y Angustia”. Dichos ejes
son la dificultad y el movimiento. Retomando lo antedicho, en mi caso, ganó ampliamente la
dificultad! El movimiento, la acción de las ideas me resultó más complicado. Quizá, porque no
me resultan amigables las nociones de la lógica. No soy “lógica-friendly”. ¡Pido disculpas si esto
implica algún tipo de discriminación!
Les comento algunas de las cuestiones que me impactaron:
• La continuidad y discontinuidad de algunos conceptos que Lacan trabaja en los
Seminarios 10, La Angustia; el Seminario 11, Los cuatro conceptos fundamentales del
psicoanálisis; el Seminario 14, La lógica del fantasma; y el Seminario 15, El acto
psicoanalítico.
Me refiero a las ideas referidas a la constitución del sujeto (alienación – separación) y
a las nociones de pasaje al acto y acting out. Fundamentalmente, el modo en el que
pasaje al acto queda articulado al “yo no pienso” y el acting out se articula al “yo no
soy” en el cuadrángulo de Pierce (Seminario 15, El acto psicoanalítico).
• La cuestión de la separación entre el Ello y el Inconciente en el cuadrángulo de Pierce
(Seminario 15, El acto psicoanalítico).
• La explicación que María Clara dio respecto del concepto de alienación en las clases
referidas al Seminario 15, El acto psicoanalítico (en la EFmdp, 2017/18). Dijo: “Uno
pensaría que la alienación es el máximo grado de dependencia del Otro (barrado). No
es así. Como operación de la constitución del sujeto la alienación está fundada en el
rechazo del Otro (barrado). Es la castración en el Otro lo que permite que el sujeto se
aliene”. (2da clase: 8/4/17)
Dichas cuestiones me condujeron a preguntarme respecto de las operaciones de constitución
subjetiva: alienación – separación. Y, particularmente, en nuestra práctica clínica cómo pensar
las diferencias entre el pasaje al acto -tal como está planteado en los Seminarios 14 y 15- y el
acto psicoanalítico.
El acting out y el pasaje al acto son nociones articuladas a la transferencia. El acting out y el
pasaje al acto no son complementarios. Son dos posiciones del sujeto respecto del Otro. En el
acting falta el Otro (duelo). En el pasaje al acto sobra el Otro (trauma). El acting out puede
definirse como una alienación fallida. El pasaje al acto como una separación fallida.
Podemos preguntarnos, en la relación del sujeto con el Otro: ¿cómo barrar al Otro sin que sea
por medio del acting out o el pasaje al acto? Estimo que la noción de acto psicoanalítico
permite abordar esta cuestión. Resulta muy interesante que al final del Seminario 10, en el
Capítulo 23, Lacan define al acto “cuando una acción tiene el carácter de una manifestación
significante en la que se inscribe lo que se podría llamar el estado del deseo” (página 342).
En el Seminario 10, La angustia, Lacan construye el esquema de la división subjetiva (un
anticipo de las operaciones de alienación – separación del Seminario 11, Los cuatro conceptos
fundamentales del Psicoanálisis). Lo hace en tres pasos: en las páginas 36, 127 y 175.
Tomaremos la última y definitiva versión:
A S Goce
a A/ angustia – castración (A tachada)
$ deseo
En este esquema de la división subjetiva puede leerse que la castración en el Otro es la
condición necesaria para la articulación entre los significantes. Que el objeto a es segregado de
lo simbólico. Y, fundamentalmente, que el objeto a produce al sujeto. Esta cuestión está
presente en la concepción de Lacan del pasaje al acto en el Seminario 15, El acto
psicoanalítico. Como dice María Clara Areta, “en psicoanálisis, la teoría del sujeto es subsidiaria
de la noción de objeto”.
En el Seminario 11, Los cuatro conceptos fundamentales del Psicoanálisis, Lacan plantea la
constitución del sujeto en una elección forzada entre el ser y el sentido. “Ser” y “sentido” son
términos que tienen una gran resonancia con el “soy” y “pienso” del cogito cartesiano
negativizados por Lacan en el Seminario 15, El acto psicoanalítico.
“En el vel alienante, si el sujeto elige el ser pierde el sentido y si elige el sentido se produce su
afánisis y pierde el ser… Es una elección que entraña necesariamente una pérdida, cuyos
ejemplos son “la bolsa o la vida” o “la libertad o la muerte” (“El deseo del psicoanalista”, Diana
Rabinovich, página 114). La operación de separación queda articulada a la pregunta dirigida al
Otro: ¿puedes perderme? Poniendo en juego su propia falta, el sujeto se produce más allá del
sentido producido por el Otro. Lacan juega con la palabra separar: se parar; se- parir, parirse;
se-partir, partirse. Tal como Lacan plantea desde el Seminario 10, La Angustia, para producirse,
el sujeto tiene que separarse de una parte de sí mismo. A esta pérdida Lacan la denomina
“separtición”.
Vayamos al Seminario 15, El acto psicoanalítico. Lacan ubica el pasaje al acto articulado al yo
no pienso – Ello y al acting articulado al yo no soy- Inconciente.
Cito a María Clara Areta: es erróneo entender al Ello “como el Inconciente del Inconciente,
como lo más primitivo. El Ello no es pre - lógico, no es instintual. Es discursivo. Se trata de
“entender la pulsión como el resonar del lenguaje en el cuerpo” (matema de la pulsión: $
losange D). “Hay algo que no se puede decir con palabras: eso es lo real”. La noción de “Ello
anticipa algo de lo real” en el sentido de “lo que no puede combinarse ni articularse al modo
del Inconciente”. “El Inconciente tiene una lógica, está articulado como un pensamiento”.
(1ra Clase: 11/3/17)
El sujeto se constituye habiendo ocupado, en primer lugar, la posición de objeto. Así pues, “la
posición primera del sujeto es como ese “él” del que el Ello freudiano habla (“Eso” habla). El
Ello no le habla al sujeto. El Ello habla del sujeto. El Ello habla del sujeto como objeto de la
pulsión”. (El deseo del psicoanalista, Diana Rabinovich, página 108)
Entonces, en el cuadrángulo de Pierce, la “primera opción forzada de la alienación: “yo no
pienso”, ser sin yo, puntúa la inexistencia, la falta de sujeto. Tiempo de la determinación
pulsional, en el que la pulsión se estructura por la demanda al pasar por el desfiladero del
significante”. (Idem, página 124)
En los Seminarios 14 y 15, Lacan articula el pasaje al acto, la caída de la posición de objeto, a la
constitución del sujeto. Pasaje al acto como caída de la escena del Otro como objeto, para
poder advenir a una posición deseante. “Lacan sitúa la salida de esta posición alienante como
una caída y no vacila en llamarla pasaje al acto inaugural”. “El pasaje al acto es reformulado
como instauración del sujeto”. (Pasaje al acto y verdad, Pablo Muñoz)
En el Seminario 15, Lacan reformula la frase de Freud: “Donde Ello estaba, el yo debe advenir”.
Teniendo en cuenta lo anteriormente expuesto, puede parafrasearse, como “Donde Ello
estaba”, el sujeto deseante deberá advenir no sin el pasaje al acto inaugural que supone la
caída de su lugar de objeto.
El acto analítico aparece tensado entre las cuerdas del pasaje al acto y acting out. Tal como
Ma. Clara Areta nos ha transmitido, en el Psicoanálisis “no hay relación causa – efecto; la causa
está vaciada”. Es decir que no todo pasaje al acto es condición del acto analítico. El analista
leerá, caso por caso, si el pasaje al acto habrá sido (o no) causa de la transformación del sujeto.
El acto psicoanalítico se entrama en los hilos de la alienación, verdad y la transferencia. Lacan
dice que el acto es del analista y la tarea es del analizante. El acto analítico ocurrirá cada vez
que, con sus intervenciones, el analista -con los mismos hilos- propicie la producción de una
nueva trama.
Busqué en el diccionario las palabras textil, trama y urdimbre. Descubrí que “urdimbre” es el
conjunto de hilos longitudinales que se mantienen en tensión en un marco o telar. La urdimbre
es vertical como el eje de la verdad. Y trama se le dice al hilo transversal que se teje en la
urdimbre para formar la tela. La trama es transversal, como el eje de la alienación.
El psicoanálisis, a diferencia de otras prácticas, teje la tela para agujerearla con el eje de la
transferencia, para que advenga el deseo de otra trama a des tramar. Tal como dice Norberto
Ferreyra, “el psicoanálisis es la única práctica que se depone a sí misma”.
Me preguntaba por qué se me habría ocurrido esta metáfora textil. Nada original: porque está
en Freud (tejer el bello púbico para tapar el horror a la castración); está en Lacan, en el
término “estofa”. Y porque hace 30 años que vivo en Mar del Plata, ciudad en la que la
industria textil ha sufrido y sufre los embates del neoliberalismo.
Vaya mi cariñoso homenaje a las trabajadoras textiles. En especial, a aquellas que he
escuchado en el Hospital Público, quienes me han transmitido las vicisitudes del deseo y la
dignidad del sujeto.
Sylvia B. Moretti
Mar del Plata, 1 de junio de 2019.